Tras el éxito del musical “THE PRODUCERS“, que consiguió el record al conseguir 12 premios Tony, todos aguardabamos el nuevo musical de Mel Brooks con Susan Stroman y era inevitable la comparación con el megaéxito de su anterior trabajo, algo bastante absurdo pero que todo el mundo hace.
Los críticos esperaban a Mel Brooks con las garras afiladas, tras haber sido pillados por sorpresa con el éxito de “Los productores” y no estar contentos con el exagerado número de estatuillas con las que se hizo en los Tony, alegando como siempre, que había tenido la suerte de estrenar en un año con rivales de poco peso.
“El jovencito Frankenstein” (Young Frankenstein, 1974) que dirigió Mel Brooks para el cine, nació como un clásico del humor, que en la línea habitual de Mel Brooks, parodiaba un género cinematográfico, en este caso el cine de terror. Aún así, mucho público joven al que aterra la idea, de ponerse a ver una película en blanco y negro, no la conocía y se enfrentaban a una historia completamente nueva, como ocurriese con “Los Productores”, que a pesar de ser en color y haber conseguido el Oscar al mejor guión original, sólo era conocida en los círculos cinéfilos.
Para estrenar este musical buscaron uno de los teatros con más capacidad de Broadway, confiando en arrasar de nuevo en taquilla.
La escenografía era espectacular y algunos momentos como la aparición del laboratorio del doctor eran increíbles, por el espacio que ocupaba en un escenario de enormes dimensiones.
Estrenada en Broadway el 08 de Noviembre de 2007, el musical seguía fielmente el guión de la película, insertando números musicales con melodías pegadizas, a la vez que con letras muy graciosas, que es lo que esperado de Mel Brooks, que como autor del guión original conoce perfectamente las posibilidades de cada momento y cómo sacar de él la mejor parte.
Para los papeles protagonistas el casting se hizo con sumo cuidado consiguiendo a Sutton Foster y Megan Mulally que estaban geniales en sus papeles de ayudante y de novia del doctor, Christopher Fitzgerald estaba estupendo como el jorobado Igor y Fred Applegate se desdoblaba en los papeles del Inspector Kemp y el ciego, mientras que Andrea Martin daba la imagen exacta de Frau Blucher, siendo quizá Roger Bart quien interpretaba a Frankenstein el más flojo de todos, pero de nuevo teníamos una obra coral apoyada por varios actores, que fue bien recibida por el público, como veremos al hablar de los premios conseguidos.
Posiblemente el gran error de la producción fue el hecho de no poder resistir la presión de tener que llenar diariamente el Hilton Theatre y se vio obligada a cerrar tras unas 500 funciones, que si bien no se puede considerar un fracaso, lo cierto es que abandonó mucho antes de lo esperado por los productores, aunque sacaron una compañía de gira por Estados Unidos con un montaje menor del musical que siguió durante bastante tiempo.
Susan Stroman tenía sus momentos coreográficos de lucimiento como el inicial “The happiest town in town” y Mel Brooks supo dar a cada actor su oportunidad de destacar “Please don’t touch me” o “Deep love” (Mulally), “Roll in the hay” o “Listen to your heart” (Foster), “He was my boyfriend” (Martin), “The brain” o “Together again” (Bart), si bien los temas ganan mucho más vistos en escena que escuchados simplemente en el CD.
El musical nominado a tres premios Tony de los llamados menores, no se hizo con ninguno de ellos, mientras que consiguió el de mejor musical que otorga el Outer Critics Circle y los premios del público que promueve Broadway.com, donde ganó cinco premios al mejor musical, actor protagonista (Bart), actor de reparto (Fitzgerald), actriz de reparto (Mulally) y pareja escénica (Bart y Sutton Foster), confirmando que el musical gustaba al público, a pesar de lo que opinasen los críticos, que finalmente acabaron divididos en sus valoraciones sobre el mismo.
Como curiosidad añadir que el cierre anticipado del musical el 04 de Enero de 2009, dejó el Hilton Theatre vacío, con un anuncio de proporciones descomunales del próximo musical a estrenar en dicho teatro, “Spiderman: Turn off the dark“, que no se estrenó hasta Noviembre de 2010 y tampoco le fue muy bien con tanto accidente a los actores.
El musical ha tenido varias giras por Estados Unidos y se estrenó en Buenos Aires en 2009, en París en 2011, en Roma en 2012 y en México en 2016, habiéndose confirmado por fin el estreno en el West End londinense para Septiembre de 2017, dirigida por Susan Stroman pero con algunos cambios sobre la propuesta original
La primera versión en idioma español se representó entre el 03 de junio y el 29 de noviembre de 2009 en el Teatro Astral de Buenos Aires, bajo el título El joven Frankestein.
Producida por Pablo Kompel y protagonizada por Guillermo Francella como Frederick Frankenstein, Rosana Laudani como Elizabeth, Pablo Sultani como Igor, Carolina Pampillo como Inga, Laura Oliva como Frau Blucher, Omar Calicchio como el monstruo y Jorge Priano como Inspector Kemp, la puesta en escena argentina contó con dirección de Ricky Pashkus, coreografía de Elizabeth de Chapeaurouge, diseño de escenografía de Alberto Negrín, diseño de vestuario de Fabián Luca, diseño de iluminación de Jorge H. Pérez Mascali, diseño de sonido de Pablo Abal y dirección musical de Gerardo Gardelín.
El libreto fue traducido por Fernando Masllorens y Federico González del Pino, mientras que la adaptación de las canciones llevó la firma de Enrique Pinti..
MÚSICA Y LETRAS: Mel Brooks
