Excelente noticia para los amantes de las comedias musicales y, especialmente, para los fans de la histórica dupla conformada por Pepe Cibrián Campoy y Ángel Mahler. Luego de varios tires y aflojes, Drácula, el musical nacional más exitoso de todos los tiempos festejará finalmente sus 30 años (cumplidos el 29 de agosto pasado). Lo hará en el Luna Park, el ámbito que lo cobijó por primera vez, en 1991 y al que retornó en 1992, 1994, 1997 y en 2000. ¿Cuándo? Del 01 al 10 de abril del año próximo. En principio serán solo seis funciones, distribuidas en dos fines de semana, pero que podrían extenderse a 14 en total.
A este acuerdo Campoy y Mahler arribaron luego de estar distanciados durante cinco años. Los posibles motivos de la ruptura del binomio creativo fueron enumerados tiempo atrás en una nota de LA NACION, entre ellos las diferencias económicas y las críticas opiniones públicas de Campoy sobre la gestión de Mahler como ministro de Cultura de la ciudad de Buenos Aires. De todos modos, a la hora de hablar el uno del otro con este medio, ambos reconocieron en ese entonces los talentos de su colega y, en el caso de Campoy, hasta admitieron algunas equivocaciones y dejaron la puerta abierta para un acercamiento. Tras la publicación de esa nota y su repercusión, Campoy decidió dar un paso más y se comunicó con Mahler para limar asperezas. Quedaron en encontrarse cara a cara, pero por un motivo u otro eso no sucedió hasta este lunes 1 de noviembre por la noche.
Según pudo saber este medio, el encuentro tan esperado fue en la casa de una amiga de Campoy, Analía Belardi, y de este también formó parte el productor vitalicio de Drácula, Leo Cifelli. No hubo espacio para reproches ni pases de facturas, simplemente se pusieron de acuerdo en 10 puntos esenciales de trabajo y así, sin necesidad de abogados ni representantes -¡ni de réferis pugilísticos!- sellaron el acuerdo que posibilitará el regreso del espectáculo local más convocante (3.500.000 de espectadores a lo largo de 11 temporadas oficiales, dos de verano, seis giras nacionales y cuatro internacionales) y taquillero (70.000.000 de dólares de recaudación total) de todos los tiempos.
Otro antecedente que ayudó a firmar la pipa de la paz fue el vivo de Instagram que Cecilia Milone realizó el 29 de agosto, el día exacto en que se cumplían los 30 años de Drácula. Para sorpresa de todos, en un momento coincidieron “al aire” Campoy y Mahler. Si bien el diálogo no fue tan distendido como en las viejas épocas de amistad y camaradería volvieron a confirmar el compromiso de encontrarse a hablar. El hecho también fue positivo para Milone, quien hasta entonces se encontraba distanciada de Cibrián luego de que en agosto de 2018 este abandonara el proyecto de La jaula de las locas (por diferencias con Nito Artaza, el productor y coprotagonista del proyecto), que él iba a protagonizar y ella a dirigir.
Ya confirmado el regreso de Drácula, ahora la idea es convocar a todos los integrantes del elenco original para que repitan sus roles. Hasta el momento están confirmados Juan Rodó y Cecilia Milone, como el conde Drácula y Mina Murray, su objeto de amor. Pese a que estaba encantada de sumarse al festejo, Paola Krum, la primera Lucy (el otro personaje protagónico femenino), no podrá ser de la partida por un compromiso teatral previo. La reemplazaría Alejandra Radano, quien en 1991 debutó en el musical haciendo el papel de Ninette y luego pasó a encarnar a Lucy cosechando excelentes críticas. El resto será contactado a partir de mediados de mes, luego del recital que Rodó y Milone ofrecerán el 13 de noviembre en el teatro Ópera bajo la conducción de Mahler. En este show (titulado Musicales en concierto), al que Cibrián asistirá como espectador, Mahler anunciará oficialmente el regreso de Drácula.
Cabe recordar que hace cinco años hubo un intento fallido por festejar otra fecha importante para el espectáculo: la de las bodas de plata. Antes de la ruptura, Campoy y Mahler habían soñado con celebrar el récord con una función de gala en el mismísimo escenario del Teatro Colón. Pero como las autoridades de la casa lírica sólo permitían una versión cantada de la obra, Campoy se rehusó a hacerla y el proyecto naufragó sin otras alternativas superadoras. Por último, hace unos meses, cada uno por su lado especuló con festejar los 30 años de Drácula a su manera. Mientras Campoy pensaba en hacerlo sin la música de Mahler (quien desde el distanciamiento no le autorizaba a usar sus composiciones), el músico empezaba a pensar en el Movistar Arena para una gran y nueva puesta en escena. Pero, ahora, superado el entuerto entre ellos (al menos en lo que respecta al homenaje a Drácula), decidieron olvidarse de estas opciones y volver a la fuente, al lugar donde nació la criatura: el Luna Park. Al igual que en 1991, se utilizará el formato teatral del estadio, con el escenario montado sobre la calle Lavalle, y una capacidad máxima de 5000 espectadores. Luego de las funciones en el recinto de la Av. Corrientes y Bouchard, el espectáculo saldrá de gira durante tres meses por las ciudades más importantes del país. Queda por descubrir si la dupla Campoy-Mahler (con una veintena de musicales en su haber, entre ellos los exitosísimos El jorobado de París, Las mil y una noches, Otelo y Dorian Gray, el retrato) tendrá vida más allá de los festejos por los 30 años de Drácula. Ojalá que sí.
